Cuando los mecanismos fisiológicos no pueden mantener la temperatura corporal dentro de sus valores normales (38-39º en las mascotas) y la temperatura llega a los 41º, hablamos de golpe de calor.
Este aumento de la temperatura corporal puede causar lesiones multi orgánicas en el riñón, hígado, aparato digestivo, sistema nervioso y alteraciones en la coagulación que en unos cuantos casos poden causar la muerte del animal.
Los animales son más sensibles que las personas al calor puesto que no pueden sudar. Para intentar bajar la temperatura, recurren a sistemas menos eficaces como jadear y transpirar a través de los cojinetes y de las zonas con poco pelo, tales como el abdomen.
Hay animales que tienen más riesgo que otros a sufrir un golpe de calor. Hay muchos factores que predisponen a ello, como la obesidad, animales muy jóvenes o animales de edad muy avanzada, los de piel oscura, los que sufren enfermedades cardíacas o pulmonares, ...
- Los perros... las razas braquicéfalas (bulldog, boxer, pug,...) por su anatomía (nariz estrecha y corta, paladar largo y laringe estrecha) tienen dificultades respiratorias y para termo regular.
- Los gatos... suelen tener menos riesgo de sufrir golpes de calor ya que en caso de hipertermia reducen la actividad y buscan los lugares más frescos. Las razas Persa e Himalaya son las más sensibles.
- Los conejos y hámsteres... son especialmente sensibles. 30º de temperatura ambiental ya les supone cierto riesgo. Hay que vigilar donde dejamos la jaula y asegurarnos que siempre dispongan de agua.
- Los pájaros... la jaula debe tener sombra y debemos facilitarles una bañera o vaporizar agua.
Independientemente de todos estos factores, las principales causas de golpe de calor en los animales son: dejarlos unos minutos encerrados en el coche (aunque dejemos alguna ventana bajada), atarlos en una zona sin sombra ni ventilación o hacer ejercicio en horas de máximo calor.
Los síntomas de un golpe de calor:
Lo primero que aparece es el jadeo de forma rápida con una respiración forzada. De esta manera, el animal intenta eliminar el exceso de calor corporal pero cuando esto no es suficiente, la temperatura sigue subiendo y aparece el saliveo excesivo, mucosas enrojecidas o azules, taquicardia, vómitos, diarrea con sangre, alteraciones en el estado mental (debilidad, desorientación,...), convulsiones, estado comatoso y finalmente, parada cardiorrespiratoria que provoca la muerte del animal.
¿Qué debemos hacer si nuestro animal sufre un golpe de calor?
Es imprescindible llevarlo rápidamente al centro veterinario más cercano, un golpe de calor es siempre una urgencia médica. Si no actuamos con rapidez, pondremos en peligro la vida de nuestro animal.
Durante el desplazamiento al centro veterinario, debemos intentar tranquilizarlo y llevarlo en un lugar fresco. En ningún caso lo mojaremos con agua muy fría (el agua fría evita que el calor se siga liberando del cuerpo ya que los capilares de la piel se cierran). Lo refrescaremos con trapos mojados o con spray, sobre todo en las patas, en la cabeza y en el abdomen. Bajaremos la temperatura de forma progresiva hasta los 39,5º como máximo (si la bajamos más, el riesgo de hipotermia es importante).
Para controlar la temperatura rectal, hay que utilizar un termómetro digital lubricado, a poder ser, con vaselina o jabón.
Una vez en el centro veterinario, se valorará si hay que seguir bajando la temperatura, algunas veces con lavados gástricos y enemas. Se le administrarán fluidos intravenosos y en la mayoría de casos, antibióticos.
A partir de aquí, el tratamiento variará según el caso y es que puede ser necesaria una transfusión de plasma, fármacos protectores gástricos, anti convulsionantes, anticoagulantes,...
Una vez estabilizando el animal y según el resultado de las analíticas sanguíneas el veterinario valorará el seguimiento del caso ya que las consecuencias de un golpe de calor (daño renal, hepático, neurológico, arritmias cardíacas,...) pueden aparecer unos días más tarde.
¿Cómo podemos prevenir un golpe de calor?
- Hay que asegurar que los animales siempre tengan abundante agua fresca al alcance
- Tenemos que evitar hacer el paseo en las horas de máximo calor
- Los animales deben estar en zonas frescas y ventiladas. Si tienen que estar en el exterior, asegúrate de que tengan una zona con sombra y bien ventilada
- En ningún caso podemos dejar al animal encerrado en el coche. 30 minutos a menos de 25º en el exterior, o menos de 10 minutos a 32 grados en el exterior, pueden resultar fatales para los animales.
En caso de duda o urgencia, llame al 93 886 05 77